En la zona de Valencia, desde Sagunto hasta Cullera pasando por Bétera o Manises y Torrente definen un área metropolitana muy compacta y homogénea en cuanto a precios de inmuebles se refiere.

Hablamos de una estructura socioeconómica consolidada desde los años 60 del anterior siglo que se comporta de un modo previsible en función de las coyunturas económicas y de los ciclos de crecimiento o recesión.

El actual estado expansivo pronto se contraerá y probablemente dará paso a un estancamiento de precios seguidos de una moderada recesión. Esto lo comenzaremos a ver a medio plazo.

No es fácil predecir el futuro de los precios, pero si se puede observar ciertas tendencias que definen un modelo estadístico de comportamiento bastante razonable dentro de la incertidumbre. La vivienda de segunda mano se estancará en precios no así la nueva ya que los materiales de construcción han subido mucho de precio, cada vez son más caros y esto se ve reflejado en el alto precio de la vivienda sin estrenar solo al alcance de personas con un fuerte poder adquisitivo.